ME VOY A ROSARIO a un Congreso de Astronomía. Así que hasta el lunes no me internaré en la blogósfera.
PEROOO, antes de irme, fui a buscar los resultados de los ANALISIS que me había hecho. ¿Se acuerdan? esos para ver por qué no generaba piel.
Resultó que poseo una subespecie de glóbulo rojo (Removedorus Pissi) que aparentemente (estuve googleando y hay pocos estudios) activa en ciertas personas una enzima denominada Migreta Confucius (La paradoja = esta enzima impide que tenga a una encima) que potencia los miedos a perder la individualidad y el control sobre sí mismo generando confusión y temor inconsciente.
También estuve investigando que se empieza a correr el rumor de que los poseedores de este tipo de glóbulos rojos ya están siendo buscados por Bush y sus secuaces, dado su potencial para confundir al enemigo.
Por lo tanto hay dos razones de peso para comenzar a hacerme el tratamiento para erradicar estos glóbulos:
1) Que Bush no me utilice como arma de destrucción masiva de pseudo-poseedores de armas
de destrucción masiva.
2) Que prefiero no generar nada a estas personas especiales ya que el efecto de mis glóbulos en su enzima sólo hace aflorar en ellas inestabilidad, miedos y barreras en vez de generar piel.
No quiero moverle el piso ni confundir más a nadie. No me interesa ser una luz si no me pueden mirar a los ojos. No me interesa tener química si los besos se quedan en sus labios. No me Interesa hacer ver cosas si esas cosas no las podré compartir.
Soy un ser emocional y ya no quiero seguir generando revoluciones mentales en nadie. Sólo quiero emociones sin barreras, compartir un abrazo, un beso, un sueño, un amanecer.
Dicen que el tratamiento es largo y no hay certeza de que los glóbulos cedan. Parece ser que estaré condenado a vivir una vida de profundidad y emociones a flor de piel en soledad...
ULTIMO MOMENTO = Análisis teóricos de las últimas horas indican que se encontró una posible reacción química que contrarrestaría la acción de la enzima. Sería producida por el contacto y la proximidad física entre los poseedores del Removedorus Pissi y de la Migreta Confucius. Los científicos dicen que en los cálculos el contacto generaría una proteína que inhibiría los efectos de la Migreta.
Lamentablemente, no hay voluntarios en quienes experimentar esta solución ya que los sujetos de estudio nunca accedieron a exponerse por miedo a los efectos colaterales...
Seguiremos informando.
miércoles, 26 de abril de 2006
ANALISIS = Resultados
sábado, 22 de abril de 2006
viernes, 21 de abril de 2006
Resentimientos
La vida suele no ser como queremos. El pasado nos marca y determina de formas odiosas a veces. Nuestra historia hace que seamos lo que somos y en ese combo a veces hay mucha ira, mucho resentimiento. A pesar de que queremos zafar de todo eso y no ser como las personas que nos hicieron o hacen sufrir, a veces toda esa carga no la sabemos separar de nuestras acciones para con todos los demás y terminamos actuando igual o peor que aquellos que nos lastimaron. Nuestra vida no tiene por qué ser un calvario o estar condenada a ser vivida entre la mierda y el dolor por el sólo hecho de que eso fue lo que nos rodeó. Si no sabemos ver en nuestro presente que podemos construir relaciones diferentes, nexos positivos y que nos hagan crecer, estamos saboteando nuestro propio destino. No hay excusa que valga para ello. Si no tenemos el valor de torcer la historia por nosotros mismos, ya no hay a quien culpar. Pero es triste lastimar y lastimar una vez más cuando supuestamente queremos. Cuando de seguro (ya no supuestamente) nos quisieron. Y tal como éramos, hasta con nuestras miserias. Tal vez creamos que no estamos repitiendo la historia, pero ¿no será que nos estamos vengando de todo lo que nos hicieron sufrir con quienes no lo merecen? La autocrítica si sólo se queda en la simple resignación a abandonar todo y seguir igual la próxima vez es sólo una mediocre fachada para seguir repitiendo los mismos cómodos errores una y otra vez, lastimando de nuevo y lastimándonos, profundizando nuestra soledad y nuestra ira contra quienes son responsables de esto, cuando en realidad ya no hay otro responsable más que uno mismo. Y si uno no quiere ser eso, pues está en uno dejar de serlo y generar el cambio, el único camino hacia una felicidad real y no basada en palabras, metáforas y realidades paralelas y completamente artificiales que inventamos para hacernos creer que no hay otra salida que el paso del tiempo.
jueves, 20 de abril de 2006
AYER y HOY
AYER
No pasó más de un día desde que nos vimos por primera vez hasta que nos dimos ese beso que nadie sabe quién de los dos empezó a dar primero pero que fue imparable e inolvidable. No pasó más de una semana hasta que viajé 1000 kilómetros para verte de nuevo. Y pasaron una a una ciudades (Villa Carlos Paz, San Rafael, Buenos Aires, Asunción del Paraguay, La Plata) que fueron testigos privilegiadas de nuestro amor infinito, y también de nuestras angustias y miedos. Distancias que acortábamos con nuestros corazones, dolores que opacábamos con el sólo saber que nos teníamos, fuese como fuese.
Ella era chica, una adolescente, pero al encontrarnos descubrimos un código común y cierta melancolía que nos unía. Había algo en ella que la hacía ser madura a un nivel inexplicable. Pero ahora veo claramente que esas mismas cosas que hacen que seamos maduros o especiales, también suelen ser las causantes de que nos alejemos, de que crezcan barreras que nos separan de los seres de quienes nunca pensamos que nos separaríamos. Las huellas y cicatrices que nos moldean y hacen que nos entendamos, crean distancias insalvables entre nosotros, esas personas especiales que cada día luchamos por crecer y ser mejores. Pero a veces no nos alcanza.
Desde el principio las señales estaban ahí y no quisimos verlas. Sabíamos que no iba a ser fácil pero pensamos que el amor todo lo podría. No podíamos cambiar el pasado e hicimos de cuenta que el presente era nuestro tesoro. Pero el silencio le fue ganando a esa canción que empezamos a cantar y cada vez costaba más poner las letras. La competencia fue ganando a ese equipo que parecíamos ser. El dolor se fue apoderando de la risa y la cajoneó hasta nuevo aviso. El pasado cerró el cajón y se tragó la llave en esas fauces llenas de sufrimiento y locura. Y cuanto más profundo se hacían nuestros lazos, más oscuro era el camino y más silenciosa la caminata. Las lágrimas no dejaban ver por dónde transitábamos y tampoco dejaron ver los por qués de haber elegido este último sendero. No me arrepiento de haberlo elegido aunque hayamos llegado al punto de decirnos llorando:
-"¿Puede ser posible que yo siempre sepa que vas a estar si te necesito y vos también sepas que yo voy a estar, pero eso sea todo? ¿Alcanza con eso?"
Pero ya no podíamos darnos más. Cuando el amor se convierte en estorbo. Cuando no hay forma de amar si no se caen las barreras. Cuando las barreras son demasiado pesadas y no basta con una simple decisión de levantarlas. Y todo nuestro amor quedó perdido y bastardeado en medio del espanto y el dolor, de la imposibilidad de siquiera haber discutido alguna vez, haber podido hacer algo para cambiar. No era posible. Debías hacerlo sola. Asumir eso fue terrible. Reconocer que en ese momento yo pasé a ser una amenaza a tu estabilidad y la metáfora de tu sufrimiento. De repente ya no poder tocarte o que no pudieras mirarme a los ojos y a la vez saberte herida hasta las entrañas. Saber todo y no poder hacer nada. Saber más que vos misma y sentir el dolor que vos no te animaste a sentir. Sufrir por los dos y verte partir en medio del silencio. Pasar del todo a la nada. De la confianza total al silencio sepulcral. A la agonía de forzarme a olvidarte por el bien de los dos. A ese sentir que toda nuestra historia no parecía significar nada para vos. Dos años y medio en que vivimos de todo y en todos lados.
Cada tanto te pensé o te soñé.
Y seguí adelante. Nunca más te vi o te oí. Esos amigos en común sabían que no debían hablar de vos. Aún así cada tanto algo supe, que seguiste estudiando astronomía, que ahora trabajabas en el Obser. Que decidiste a último momento no ir al congreso de Mardel en el 2004. Que seguiste persiguiendo tus sueños, ya sin mi interferencia.
HOY
Hoy me desperté y sin un por qué, después de meses, de repente te pensé. Pensé si habrías logrado salir adelante de la mierda y el horror. Si alguna fuerza inexplicable te habría dado la posibilidad de enfrentar al pasado y acomodar tu presente. Pensé qué sería de nosotros si todo hubiera sido diferente.
Enterré los pensamientos y salí a trabajar, a mi rutina diaria.
Al mediodía chateé con un amigo de Mardel que la astronomía me hizo conocer (como a casi todas las personas importantes en mi vida) y que también se hizo amigo de ella cuando salíamos. Hablamos del congreso al que asistiremos en Rosario la semana que viene y me hizo la pregunta de cuál había sido el último congreso en el que yo no había dado una charla. Fue en el primero, el de Villa Carlos Paz en el 2001. Le comenté que fue el congreso más hermoso de todos y le dibujé un corazón de MSN relacionando con que allí la conocí a ella.
Mi amigo se sorprendió y me dijo que era la primera vez que le hablaba bien de ella. Me extrañó esa reflexión ya que implica confundir no querer hablar del tema con hablar mal. Le dije que no era así, que fue una etapa hermosa y él me respondió que siempre pensó que esa época yo la recordaba negativamente.
-"Es imposible recordar negativamente los mejores momentos de mi vida y a quien fue el único amor que tuve",
-"Si te sirve de algo, ella siente exactamente lo mismo"
cri cri cri
¿La verdad? No me sirve de nada. No sé para qué pensó que podría servirme.
Después de dos años y tres meses es la primera vez que supe algo de ella en relación a mí. Algo de esa persona que quise dejar atrás a toda costa y a quien maté pero cada tanto se empeñan en resucitarla.
Mis últimas imágenes de ella son de alguien desconocido para mí, una piedra inerte y herida escapando de todo y callada. Si bien uno siempre supo que nuestra historia había sido muy importante, jamás lo supe de sus labios o su mirada o aunque más no fuera a través de una lágrima de adiós. No fue así. Mi amigo pensó que después de tanto tiempo ya se podría hablar del tema tabú. Se equivocó. Nadie sabe lo que sucedió, cómo sucedió, por qué. Es un secreto que compartimos con ella a pesar de todo.
Y volví a trabajar en la tarde.
Pensando en ella y en qué habría sucedido en estos años, cómo se sentiría, si habría tenido la fuerza para sobreponerse al horror y a enfrentar la vida.
Y entonces me tocó cobrar en la casa de una familia joven donde los últimos meses se había dado una situación particular: la mamá, embarazada o convalesciente, intentaba darle a su hijita de unos 4 ó 5 años el billete para que saliera y atravesando el patio de adelante me lo diera a mí. Durante meses los intentos fueron infructuosos y la nena, vergonzosa, se aferraba a la pierna de su mamá y berrincheaba quedándose inmóvil y no salía. La madre tenía que venir y pagarme ella. Hoy, casi llegando a la puerta, de repente imaginé que la nena iba a perder el miedo, se me iba a acercar e iba a darme la plata sin problemas.
Toqué el timbre, me anuncié, una señora me dijo que esperara y entonces sucedió:
la puerta de la casa se abrió y una enana preciosa se dirigió a mí con el billete y me dijo "Hola" sonriendo. La saludé, le agradecí, le sonreí y cuando volvió hacia su puerta me dijo "Adiós", ya junto a su abuela. "Adiós", le dije y sólo pude dar unos pasos hasta pararme en medio de la vereda y quedarme atónito.
La nena estaba creciendo.
martes, 18 de abril de 2006
Rotura De Noche
Y EL SABADO ROMPIMOS LA NOCHE.
Para escapar a la tortura de las noches vacías de lo que no fue decidí llamar a un amigo y aumentar el promedio anual de salidas extremas (?) denominadas en nuestra jerga (¿o juerga era?) "Roturas de noche".
Tras una cena en el lugar de siempre ("siempre" = 3 veces en los últimos 10 años) partimos hacia Las Cañitas, a pescar... Juasssssss, A pescar un resfrío porque se había puesto fresco, ¡¡¡¡ lo parió !!!!
Tras exhibir nuestra presencia por la zona para desatar la locura femenina decidimos finalmente no hacerlas esperar más y entramos a Jackie O. Nos dirigimos en busca de mesa y encontramos una. Comenzando la seguidilla de confirmaciones de nuestra invisibilidad, viene un mozo y nos empieza a desarmar la mesa... Sacan todo y nos quedamos ahí parados hasta que armaron como una barra. Nos sentamos finalmente y a los 4 segundos se sienta una pareja y pelan sus cigarrillos. Nos paramos y nos vamos para arriba. Ya arriba el resto de la noche transcurrió sentados escuchando música y observando a nuestro alrededor. Cada vez costaba más respirar, como siempre. Ojos y garganta ardiendo y... una interacción!!: viene una mina a pedir si tenemos fuego.. JAJAJAJA.
A la hora y media una mina me hace como "hola" con la mano y sonríe !!!! Era para saber si el asiento vacío que había enfrente nuestro estaba ocupado. Una vez que supo que no, se sentó dándonos la espalda.
Mientras tanto nosotros contábamos la cantidad de tipos que intentaban levantarse a una rubiecita linda que estaba por ahí con una amiga menos agraciada. Tipos y minas se cagaban de risa de quién sabe qué.
En eso una bagartija se sienta en el apoyabrazos de mi sillón y cada vez tengo menos espacio para estar sentado derecho. La zona izquierda de mi campo de visión es sólo la espalda y el culo de este ser. Cada vez me aplasta más, siento el calor de su cuerpo... En fin, no sé, en ningún momento ni pidió permiso ni disculpas ni se dio vuelta. Confirmó mi calidad de invisible, bah, sólo faltaba que se me sentara arriba paera confirmarlo del todo. Después se fue, se debe haber pensado que me hizo un favor al "regalarme" esos instantes de aplastamiento...
Seguimos analizando los comportamientos gregarios hasta altas horas. Había un tipo borracho que le decía cosas a cada una que le pasaba por al lado.
Y finalmente partimos. Y una vez afuera empiezan mis interacciones reales o potenciales, demostrando que no hay caso, el boliche no es lo mío.
1) En la parada del 60 filosofábamos sobre las expectativas, la diversión, la exclusión social, etc. y de la zona bolichera llegaron dos minitas. En eso se me ocurrió el asunto de que preguntarle a una mina qué carajo sirve para chamuyarlas era un buen chamuyo. Estas dos estaban ahí. Casi... estuve a punto..., pero fumaban. Chau, no tenía sentido, a ver si salía bien y la mina (una de las dos zafaba la otra ni ahí) me daba bola... Y lo interesante es que si me daba bola, tras el viaje hasta Cabildo y Monroe ("Esquina de las Lacras"), se bajó justo en mi parada... Y caminó hasta la parada del 114 que yo me iba a tomar!!! O sea, todo era posible en teoría. Y ahí estuvimos unos minutos. Luego apareció una parejita de vecinos de 19 años de mi edificio y yo los saludé y me crucé enfrente para ver si venía el 133 que también nos dejaba.
2) Enfrente, había una chica cuyos movimientos delataban que estaba haciendo lo mismo que suelo hacer yo: caminar de un lado a otro a ver cuál de los dos colectivos viene. Y espontáneamente (cada año y medio más o menos sucede) le pregunté si esperaba también el 114 y me dijo que sí, y siguió la charla. Me enteré que se bajaba en la misma parada que yo porque vive entre Naón y Estomba. También se podía tomar el 107 me decía, y sobre frecuencias de colectivos y boludeces, seguía la charla... Ahí fue que me di cuenta que estaba interactuando... y que, OBVIAMENTE, la chica no me gustaba ni ahí... Vino el bondi, avisamos a mis vecinos y lo tomamos.
3) Bajamos, la chica se fue para su casa tras un "chau" mutuo y vinimos para mi edificio con la parejita de teenagers. Al llegar a la puerta se acerca una rubiecita también para entrar al edificio. Saluda y.. me da un beso (?) OK, qué se yo, será una vecina con buena onda... No sé. Sería amiga de los otros y entonces me saludó. Yo ni la conocía.
Ya en el ascensor y con las luces iluminándonos bien, reconoce medio asustada (o al menos eso parecía):
-"Uy, pensé que eras el papá de él, por eso te saludé".......
SAY NO MORE....
sábado, 15 de abril de 2006
Burbujas I (en Palermo)
Y aquí estoy, después de meses, quizás años, en los bosques de Palermo, en el Rosedal, en los lagos, en el verde. Caminando entre la gente. Trasladando mi burbuja entre parejas enamoradas, familias unidas, personas que se quieren, gente haciendo deporte, chicos divirtiéndose. Mi burbuja se traslada sin necesidad de esquivarlos, ya que no hay forma de que se rompa. Hasta hace poco se deformó y deformó al punto de CASI romperse. Pero no. Resistió.
¡Pobre Palermo, qué sólo sabe de mí cuando lo necesito para olvidar! Para tratar de buscar no sé qué respuestas a no sé qué preguntas. Palermo siempre está ahí absorbiendo mis pesares, mis dudas, mis por qués. Mi necesidad de entender lo inentendible.
Palermo me ayuda a hacer pasar el tiempo cuando las agujas del reloj se niegan a moverse.
Palermo parece susurrarme que hay un mundo más allá de mis dolores e impotencias. Yo trato de escucharlo.
Palermo me recuerda que tengo amigos que me quieren y yo le digo que ya lo sé (¡Gracias Celeste, Enzo, Erika, Federico, Hernán!) y que no dudo de eso, aunque a veces es bueno volver a recordarlo.
Palermo me descubre solo conmigo mismo y trata de darme la fuerza para seguir adelante en esas condiciones.
Y aquí estoy. Me cruzo con gente que camina y parecen ir a algún lado en especial. Parecen tener todo resuelto. Me siento en este banco mirando el cielo, recibiendo la tibieza del Sol otoñal. Miro las rosas y un banco vacío enfrente mío. Las nubes comienzan a tapar el Sol. La gente cada vez interrumpe con menor frecuencia el sonido del viento en los árboles o el cantar de diferentes especies de pájaros mezclado en un único murmullo procedente de todas direcciones. También de fondo, el sonido de la ciudad, a la que volveré en minutos porque comienza a oscurecer. Miro una vez más el cielo, el verde, las nubes, las rosas. Inhalo energía y exhalo dolores y agradezco a Palermo por estar. Levanto mi burbuja y la paseo una última vez por los bosques.
Tal vez algún día...
viernes, 14 de abril de 2006
En El Camino V
*Salgo del laboratorio (me estoy haciendo unos análisis para ver por qué genero cualquier cosa menos piel en las mujeres que conozco) e inmediatamente me encuentro 10 centavos en el piso (y van 1,25 $ este mes).
*Me voy a trabajar y me toca visitar al milico de Colegiales...
Esta vez recibí los siguientes consejos y comentarios:
"Cuidado el año que viene, con este montonero, porque es zurdo, ¡es zurdo! y con todo el vaguerío que lo sigue, guerrillero es, así que cuidado porque se arma, se está gestando..."
"Las brujas de Plaza de Mayo, porque así les digo, son el apocalipsis, quieren quemar las iglesias, y éste hijo de puta (Kirchner) va y se fotografía dándoles un beso"
"Por eso yo les aconsejo siempre a los jóvenes, tenemos que recuperar la república"
*Sigo camino recuperándome de semejante asco y el siguiente socio es un portero que al verme la remera de Sur Astronómico me pregunta:
Portero pelotudo (PP) -"¿Y, qué tal, cómo anda eso? ¿Ya se sabe qué va a pasar el año que viene?
YO -"....... eh..? ...."
PP -"Jeje, la astrologíaaa" (con tono burlón y las manos gesticulando como si tuviera un telescopio metido en los ojos y apuntando al cielo...)
YO -"No confunda astrología con astronomía, lo mío es ciencia no mitos..."
*Llego a casa, mando a la papelera un poema para un amor hermoso e imaginario y salgo de nuevo.
*Me encuentro 10 centavos por enésima vez. ¿Es algún mensaje que no logro entender?
*Tomo el 114 a Villa Urquiza y a mitad de camino sube una chica linda. Queda parada y un idiota sentado con un amigo en el primer asiento (que es al revés o sea que la veía de frente) le empieza a decir:
"Ay, qué lengüita, mami" y más boludeces por el estilo. Y le silba (!!) como si fuera un perro. Ella no acusa recibo. Yo pienso lo bestias que son y que seguramente tienen éxito con las mujeres, como siempre.
*Voy a terminar mi día cobrándole a otro portero. Desde su departamento me dice que no puede bajar porque está con parte médico desde hace un mes y tiene que descansar. (Nota del bloguero: El día anterior se lo vio en perfecto estado esperando el tren en la estación Colegiales. Debe ser parte de la rehabilitación).
Today life sucks
domingo, 9 de abril de 2006
En El Camino IV
Y sí, no pasan muchos días sin que pueda hacer un compendio de interacciones peculiares callejeras...
*Me voy a tomar el 113 para Flores. En la parada me siento en el borde de una casa y veo una lombriz medio en proceso de disecación en medio de la vereda. Decido salvarle la vida y la tiro a un cantero de un árbol con abundante tierra que hay por ahí cerca. Siento ese placer tan especial de haber ayudado al prójimo.
*En mi caminata, soy testigo de la impotencia de una tipa que queriendo salir con el auto de su propia casa se vio atrapada por un camión de La Serenísima estacionado justo en la salida de su garage. No tenía espacio para hacer nada que no fuera bajarse y protestar (al aire porque no había rastros del conductor del camión). No le daba el ángulo para salir de otra manera. Fui testigo de un caso real de prisión domiciliaria.
*Una socia me solicita información: "¿Cómo es el plan de médicos de cafetera..Ehh! cabecera ?"
Se ve que la señora tenía ganas de tomarse un cafecito.
*Un tipo con la parla digna de un político plantea si en la cooperadora del hospital le pueden apurar ciertos trámites. Como siempre, aclaro que la atención es la misma y que la colaboración es voluntaria, a lo cual el socio manda:
"Sin ánimo de tener un privilegio ni mucho menos, pero no hay una manera de agilizar ya que uno colabora?"
En mi país eso se llama privilegio. Me causa gracia como la gente aclara que no quiere decir o insinuar lo que en realidad está diciendo. Palabras, palabras, sólo eso. Si lo que quieren es un privilegio, es obvio.
*Toco y toco el timbre en una casa y nada... No contestan. Repentinamente veo consternado como hay alguien espiándome del otro lado ¡y no me abre ni me contesta!! ¡WTF, maldito engendro! Es una puerta que tiene la parte de arriba de vidrio medio oscuro y hay una cortina blanca bordada del lado de adentro. El cobarde éste me mira directo a los ojos desde adentro, lo veo entre los agujeros de la cortina...
Ah, no, SOY YO reflejado en el vidrio.. Cuac!
*Sigo mi camino, en calles congestionadas, apurando el paso para sobrepasar a varios COCITOs (COnsumidores de CIlindros TOxicos) y no tener que respirar su nauseabundo aire viciado (al día haré un promedio de 4 ó 5 sorpassos).
*En los últimos 3 días me encontré tiradas dos monedas de 50 centavos y una de 5 superando ampliamente el promedio mensual que es de unos 0,40 $, generalmente en monedas de 10 centavos. En el día que encontré la segunda moneda de 50, cuando me disponía a volver a casa tomando el 76 en Donato Álvarez y Avellaneda, se me cae la moneda de 1 peso con la cual iba a pagar el pasaje y rueda por la vereda hasta la alcantarilla. Veo su trayecto horrorizado pensando como el destino que me había premiado con dos monedas de 0,50 $ ahora me quitaba la misma cantidad como en un juego macabro de tira y afloje. SIN EMBARGO, la moneda cae a la calle y entre las rendijas de la alcantarilla había un cartón sobre el cual se deposita. Sí, ¡la suciedad de los argentinos me salvó! Pero mi mayor asombro fue pensar que... ¡¡¡MURPHY se durmió!!! ¿Qué está pasando? ¿Es un signo? ¿Una nueva era comienza? Pensé en la famosa frase en que si uno es afortunado en las "finanzas" (?) es desafortunado en el amor...
Bueh, yo más desafortunado en "eso último" no puedo ser así que perdí tiempo pensando al pedo.
Y una vez más el camino desembocó en mi casa y el cielo nublado impidió mi relajo celestial.
lunes, 3 de abril de 2006
Blancos y Negros
Durante años mi psicóloga me hablaba de los grises y yo no le entendía. Para mí sólo había blancos y negros y el único gris que conocía era el de las neblinas otoñales o el que se hacía cada vez más evidente en mi pelo.
En estos días, finalmente los descubrí. Finalmente identifiqué los grises que nacen cuando los sentimientos entran a jugar en medio de nuestras definiciones y teorías. Descubrí que si hoy siento algo y mañana no, no puedo pretender que eso no les pase a los demás.
El blanco o negro implica un límite fijo en lo que podemos aceptar, tolerar, elegir, comprender. Sin embargo, ese límite no contempla el sentir, las pasiones, las emociones. Y no contempla que cada uno de nosotros atraviesa diferentes momentos con diferentes necesidades, distintos estados de ánimo.
Es real que hay un límite psicológico, un límite donde lo sano está claramente delimitado de lo enfermo. Y es lo ideal apuntar a no atravesarlo, esa es la idea. Pero la vida nos demuestra que constantemente pasamos de un lado a otro de esos límites y no somos buenas o malas personas por ello. El haberlo pasado me demuestra que tal vez vos también lo hayas pasado hoy y mañana vuelvas a estar del otro lado y no puedo juzgarte, sólo aconsejarte. Al menos darme la oportunidad de intentarlo. No prejuzgar, tolerar, dar chances.
Constantemente elegimos y creo que es ahí donde más debemos centrar nuestra sanidad, en saber qué queremos y qué no queremos. Si ese filtro que nos lleva a elegir sólo a ciertas personas dejó que vos entres en mi vida, con lo selectivo que es, por algo será.
He vivido apuntando sólo a lo que la teoría llama sano, sólo para terminar dándome cuenta que lo que es enfermo es buscar un ideal que es prácticamente inexistente. Me he enojado de ver que aquellos que elegí no lograran en los hechos ni acercarse a ese ideal a pesar de sus esfuerzos teóricos. Y la vida me puso en su lugar para entender que todos buscamos eso pero que cada momento es único y en su contexto nos hace actuar de diferente manera. Y que desde afuera todo es muy fácil y se ve con una claridad que desde adentro no tenemos. Me he sentido defraudado por no ver la consistencia entre sus palabras y los hechos y ahora me vengo a dar cuenta que ese sentimiento, que hasta se transformó en bronca, tenía que ver con el hecho de que me hacían sentir solo en mi postura extrema de blancos y negros. Estaba bueno que mis elegidos también se manejaran de este lado de los límites... pero..., los pasaban, y allí estaba yo para encauzarlos, sólo que solía no funcionarles y yo me frustraba.
Es tiempo de ya no hacerse cargo de las decisiones del otro o de criticar o juzgarlo por sus limitaciones. Si te elegí, es porque apuntamos a lo mismo, así que aconsejémonos desde la objetividad de estar "afuera" pero entendamos que las cosas no son blanco o negro, porque sólo vos sabés lo que sentís y sólo yo sé lo que siento. Y si estamos equivocados y metemos la pata, tal vez necesitemos eso para asumir verdaderamente lo que es sano y aprender y seguir creciendo.
Mientras tanto tener tus palabras y tus consejos, siempre será un soplo de aire fresco.